Ayer sábado, tuve el placer de poder estar en la entrega de los premios derecho en red, en cuyo apartado de mejor cuenta de tuiter juridica estaba nominado, que finalmente ganó la incansable @veronicadelcarp Como sobre estos premios me han pedido una crónica específica para lawyerpress, en esta entrada simplemente voy a recoger unas impresiones estrictamente personales, independientemente de que de esa jornada, han surgido muchas ideas que probablemente trataré en este blog.
Aprovechando que la entrega era en Logroño y la cercanía desde Zaragoza, pude acercarme a los mismos, y tener la ocasión de compartir el resto de la jornada con unos excelentes tuiteros y abogados, no se muy bien en que orden poner los sustantivos. Como bromeabamos en los días premios, desde luego una reunión de abogados de prestigio.
Entre la multitud de temas que surgieron en las conversaciones, tanto durante la comida, como en la sobremesa posterior y tomando vinos en la famosa calle Laurel, estuvimos hablando de los blogs juridicos. Como sabe quien me lee habitualmente en este blog ya ha traslucido periodicamente el hecho de que vengo meses reflexionando sobre el mundo de los blogs de abogados (por ejemplo en esta entrada de hace escasos 10 días). Casualmente la semana que viene se realiza en Barcelona un encuentro de bloggers jurídicos, al que por cuestiones de agenda no puedo acudir, pero que seguro que tratan temas parecidos a los que hablamos.
Ahí estaba con excelentes blogueros como David Maeztu, Javier Prenafeta o Jorge Morell. Lo cierto es que todos ellos manifestabamos similares inquietudes, latía el convencimiento de que hay que progresar en el mundo de los blogs jurídicos y que muy probablemente el camino sea ahondar en la diferenciación y personalización de cada blog. Lo mismo había hablado por otros medios con otros blogueros como Emilio Aparicio, Juan Antonio Frago o Luis Abeledo. Abogados y juristas.
Muchas veces me resulta difícil entender cual es la razón de que una entrada tenga un éxito particular y otra que a ti como autor te gusta mucho y sabes que has trabajado enormemente, no ha conseguido captar la atención de tus lectores.
Importante es también tener claro el objetivo del blog, para que quieres escribir y le dedicas un esfuerzo, y creo que en esta evolución del mismo en la que siento que que estoy inmerso, pensar más en una frase que solemos usar en tuiter "no importa tu número de seguidores, sino la calidad de los mismos". Y es algo que cada vez tengo más claro en el mundo de los blogs, no va a importar tanto el número de tus lectores, como la calidad de ellos.
El camino será por tanto escribir aquello sobre lo que apetezca escribir, pues solo de esa manera vas a poder sintonizar y transmitir la verdadera esencia de lo que te interesa comunicar, sin importarte el "éxito" numérico de las visitas de la entrada. Muchas visitas ni siquiera significan que ese visitante haya leido la entrada.
Relativicemos pues, ese número de visitantes, los contadores, o los títulos de "blog más leido de ...". Y en ese camino, creo que este blog se convertirá en un espacio en el que esencialmente trasladaré reflexiones jurídicas desde una vertiente muy personal. Más personal si cabe. Aunque eso no quita para que en el mismo de vez en cuando trate entradas más jurídicas, así como progresar con otros blogs específicos.
En definitiva un blog menos para abogados, y más para todos.
Aunque es muy importante escribir para un público muy concreto, o saber a quién te diriges, lo cierto es que si consigues tener un alcance genérico potente, eso te arrastra antes o después a otros incondicionales.
ResponderEliminarTambién hay que saber si escribes sólo para tener una especie de diario o pretendes alcanzar un público más general.
Por eso lo primero es tener claro cual es el objetivo u objetivos del blog. Como apuntaba en la otra entrada, parece que ahora le ha dado a todo el mundo por hacerse un blog, con lo cual habra temas que se traten en varios y no tenemos tiempo para leer todos los blogs.
Eliminar