Recojo a continuación cuales son en mi opinión los errores más habituales que puede cometer un profesional (y en particular un abogado en las redes sociales). Las redes sociales no son algo reciente, pero sí que es reciente el acceso de muchos profesionales al uso de las mismas, muchas veces sin tener muy claro exactamente para qué se acercan. Eso hace que se produzcan conductas y acciones que en mi opinión son equivocadas
1. No interactuar. Las redes sociales son en definitiva un conjunto de personas buscando relacionarse unas con otras. No se entra a una red social con el propósito de no establecer relaciones, de ahí que lo que se entienda como un comportamiento normalizado sea aquel dirigido a facilitar la comunicación y la interactuación, viendose mal otro tipo de conductas que también se dan, más propias de voyeurs o de stalkers (esos perfiles abiertos en facebook que no "cuentan" nada). Si no vas a contar nada de ti, si no vas a interactuar con otras personas, si no interactuas en ellas, ¿para qué quieres estar en una red social?
También podemos ver otras conductas en las cuales esas cuentas en redes sociales exclusivamente se limitan a mandar mensajes, sin "escuchar", como una especie de altavoz que repetitivamente va mandando mensajes. Tus clientes quieren ser escuchados, no solo bombardeados con tus ofertas y tu autobombo.
2. No dar valor al contenido de la comunicación. Estar en una red social y por tanto en internet supone estar bajo el permanente examen de una innumerable potencialidad de personas que van a acceder a tu contenido, lo cual exige extremar el cuidado del contenido que compartes. Es conveniente que lo que aportes tenga un valor añadido, una diferenciación, algo que te haga distinto y sobre todo algo que no asocie una idea u opinión negativa sobre ti.
3. No generar contenido propio. No todo el contenido que se comparta en redes sociales ha de ser creado por uno mismo pero sí que es conveniente que gran parte del mismo lo sea, pues redundará en la calidad percibida sobre nosotros así como también transmitirá más sobre nosotros. También debemos tener claro que no se trata de introducir el mismo contenido en cada red social, dado que habrá que adaptar el mismo a las especificidades de cada red.
4. No conocer las "reglas" de la red social. Hay dos tipos de reglas. Las primeras las determinadas por la propia red social, conocerlas nos llevará a no ser penalizados, a que nuestra cuenta no sea suspendida y otro tipo de situaciones que en nada nos favorecerán
La segunda son las reglas no escritas por las cuales se rige la propia comunidad de usuarios de la red social, son conocidas como etiqueta o net etiqueta y cada una de las redes sociales tiene sus especificidades. Son fáciles de encontrar en internet habiendo numerosas entradas de blog que las explican.
5. Pensar que estamos en un espacio radicalmente distinto. Es cierto que las redes sociales tienen especificidades y diferencias propias, pero mucha gente se acerca y accede pensando que en las mismas no rigen modelos de conducta o de relación similares a las existentes en otros espacios y esto suele generar una distorsión en el comportamiento. Así que está bien incidir en conocer las especialidades de las mismas pero sin olvidar que no dejan de ser espacios de relación entre personas humanas muy similares o con comportamientos, actitudes, respuestas y situaciones similares con el entorno offline
6. No conocer fenómenos propios de internet. Considero importante el conocimiento mínimo de una "cultura popular sobre internet" con conceptos como viralidad, lo que es un efecto streisand, etc. pues nos ayudará a movernos mejor, cometer menos errores y reaccionar más correctamente ante los mismos.
7. No valorar la comunidad. Lo más importante del uso de redes sociales es que te generas y creas una comunidad, tu comunidad, aquellas personas con las que te relacionas e interactuas de manera más intensa; en la cual se van a producir notables e importantes efectos beneficiosos derivados del trabajo en red, compartir conocimiento y aportar y ayudarse.
8. No ser 2.0. Muy relacionado con el punto anterior y con el primero. Hay que adaptarse al entorno en la www que se caracteriza por los valores del 2.0 y hay que tener esa mentalidad o no dejarás de ser un perfil sin interés, plano y que pasará desapercibido. Y sí, has leído bien, hablo del 2.0 y no del 3.0. Decir que alguien es 3.0 suena muy cool, pero hay poco más allá de eso.
9. No facilitar el contacto. Además de las interrelaciones que podamos generar en el entorno online, no debemos descuidar el entorno offline y relacionarnos también en éste. Para ello debemos dar los datos necesarios para que si alguien quiere contactar con nosotros pueda hacerlo con toda facilidad: indicar mail, indicar la ciudad donde estamos o incluso por que no nuestra dirección y teléfono. Aquí debo incluir también la conveniencia de poner una foto nuestra en nuestra imagen de avatar. Como decía anteriormente las redes sociales son redes de relaciones entre personas y siempre queremos saber (ver) con quien nos estamos relacionando. Poner una buena fotografía facilita e incrementa la interactuación.
10. No ser tu mismo. Falta de naturalidad. La pongo en último lugar pero probablemente es la más importante. Queremos relacionarnos con personas y no nos gustan las personas falsas, nos gusta la naturalidad y quien nos transmite quien y como es. De hecho en redes sociales y sobre todo en algunas tan inmediatas como tuiter tarde o temprano por mucho que quieras ocultar alguna faceta de tu personalidad o algo que no quieras mostrar, acabará saliendo y será detectado y en ese momento tu comunidad y las personas con las que interactuas percibirán inmediatamente la disociación entre el perfil que pretendes mostrar y como eres. De hecho, se va a ser más condescendiente con tu manera de ser que con un perfil que se vea que es artificial o se detecte falsedad en él. Es cierto que hay auténticos maestros en el arte del camuflaje capaces de dar una imagen distinta a la que realmente son y que detrás de ellos no hay más que humo; y también es cierto que hay mucha gente que por torpeza o inocencia tiene dificultad para detectar a estas sirenas, pero tarde o temprano cometen errores y son detectados. No queramos contentar a todo el mundo porque es imposible, no queramos vender lo que no somos porque no nos va a servir de gran cosa. Sé tu mismo.