Con el llamativo e irreal título de abogacía 4.0 (en estos momentos no podemos hablar de abogados más allá del 2.0 y al 3.0 se le ve el horizonte) se ha celebrado en Vigo un excelente congreso por y para abogados, desde el impulso de esos abogados que me gustan y con los que me siento cómodo: abogados activos, preocupados por crecer y mejorar, inquietos, y que pasan de la idea a la practica. Los abogados Novos de Vigo.
He tenido la excepcional suerte de que contarán conmigo como ponente y digo que ha sido una suerte por permitirme descubrir una ciudad que me ha acogido, participar de una jornada formativa de alto nivel, sorprenderme cuando un periódico local quería entrevistar al "bloguero" (ósea yo), recibir el cariño en cantidades sonrojantes de muchos abogados y ya amigos, divertirme, "volver a ser el tipo que algún día fui" (como cantan los piratas en "Años 80" esa canción que tanto significado tiene para mi) y encontrar personas que serán importantes en mi vida.
Ya escribí en otra entrada sobre la sesión técnica de la mañana, con muy alto nivel y que sirvió para poner en conocimiento de los asistentes los cambios en que ya está inmersa la abogacía, así como conceptos muy necesarios sobre estrategia e identidad digital.
Me agradó especialmente de la tarde la cantidad de asistentes dispuestos a escuchar hablar sobre la función social de la abogacía. Dice algo muy bueno de los abogados de Vigo. También el poder conocer a Pilar la decana de Ourense. Todo un ejemplo de compromiso social unido al ejercicio de la abogacía. También poder asistir en directo al debate y confrontación entre otros abogados comprometidos queriendo hacer algo por la problemática de la vivienda frente a la posición institucional de su colegio. Espero sinceramente que sea algo que se resuelva y que se llegue a un punto de consenso que permita el ejercicio transformador del que hablé en mi intervención. Los abogados somos agentes cualificados de la transformación y no podemos quedarnos quietos. Quedarnos quietos no es transformar. Y transformar es beneficio para el colectivo, para la sociedad.
Especial valoración le doy a poder "desvirtualizar" a tuiteros que seguía Fabián, Iago, Bárbara, María y también conocer a otros que no seguía Juan, Victoria, Eva, Delia. Espero no estar dejandome a nadie que el hacer listas es el peligro que tiene. También el volver a coincidir con quien ya conocía personalmente, Sara y Pepe.
En lo personal agradecer a todos el poder disfrutar de unos días maravillosos. Porque ese es el verbo que para mi resume mi asistencia al congreso, disfrutar.
Porque disfruté intelectualmente del congreso, disfruté aprendiendo, disfruté de la diversión de la noche, disfruté del afecto de compañeros, disfruté de la complicidad de vaciles, risas y fiesta, disfruté de estar en antros, disfruté de hacer lo que no hay que hacer, disfruté de la falta de racionalidad, disfruté de las conversaciones racionales, disfruté de crear proyectos, disfruté de conversaciones intrascendentes, disfruté de hablar con quien no conocía de nada ni nada tengo en común, disfruté de llevar la contraria y hacer lo que no esperaba de mi, disfruté del cansancio, disfruté de esos momentos de comportamiento cuasi adolescente.
Disfruté de Vigo y de sus abogados